Ayer estuvo en el programa del Gato Sylvestre el pibe Iván de la villa 21 que fue torturado por la prefectura, contando como fue el hecho y como era de esperar la respuesta de los torturadores que actúan con toda impunidad como en tiempo de dictadura, fue la siguiente:
URGENTE— La Garganta Poderosa (@gargantapodero) 5 de octubre de 2016
Iván detalló hoy las torturas en TV. Volvió a la 21. Y acaba de entrar a su casa escapando de un prefecto: "Hablaste, hijo de puta".
LA PREFECTURA QUE TORTURÓ A IVÁN, ACABA DE PERSEGUIRLO HASTA SU CASA POR HABERLOS DENUNCIADO. ¿QUÉ CARAJO ESPERAN? ¿QUE NOS MATEN A TODOS? pic.twitter.com/KCRovI3UQG— La Garganta Poderosa (@gargantapodero) 5 de octubre de 2016
ACÁ ESTÁ EL PREFECTO QUE ACABA DE CORRER A IVÁN HASTA SU CASA, POR NO CALLAR LAS TORTURAS QUE SUFRIÓ.— La Garganta Poderosa (@gargantapodero) 5 de octubre de 2016
COMO SIEMPRE,
SIN IDENTIFICACIÓN. pic.twitter.com/LZhGi8XAI6
Tenés la foto, tenés los testigos, qué esperan para sacar esta gente de las fuerzas, tipos como estos no pueden portar armas en la Argentina ni en ninguna parte del mundo.
Mientras tanto en la ciudad cordial de Santa Fe:
ResponderBorrarIvan Franco, dirigente del MUP Santa Fe
Por Movimiento de Unidad Popular (MUP)
Comunicado de prensa:
El domingo 25 de septiembre a la madrugada efectivos de la comisaría 14 y del Comando Radioeléctrico irrumpieron sin mostrar orden de allanamiento en un domicilio de la localidad de Rincón donde se encontraba el compañero Iván Franco, miembro de la conducción del MUP de la Ciudad de Santa Fe y Presidente de la Cooperativa PUFI-Limitada.
Tanto Iván Franco, como el dueño de la vivienda, Emiliano Mendoza, fueron trasladados en carácter de detenidos a la dependencia policial ubicada en el Club de Campo de UPCN.
Allí comenzaron a golpearlos desenfrenadamente con golpes de puños, rodillazos y patadas, todo mientras eran amenazados con ser asesinados. La peor parte la llevó el joven Emiliano Mendoza, quien fue literalmente desfigurado e intentó quitarse la vida en el calabozo por el dolor extremo que le habían provocado los golpes.
Mostrando el rostro de Mendoza amenazaban a Franco con “desfigurarlo de la misma manera” si no decía “dónde estaban las armas”, para poder incriminarlos de algún delito del que Iván no tenía conocimiento. Frente a la aclaración de que Iván era militante político y de derechos humanos, los policías respondían que “en la provincia mandaban ellos”.